LA REDENCIÓN ENTRE LA TRADICIÓN Y LA LA MODERNIDAD

Tal vez muchos sepan mi vinculación de muchos años con el Victoria Plaza Hotel. Allí estuve trabajando ente 1968 y 1978 y de1985 a 1992. La Redención fue parte del producto y lo sigue siendo.
Por María Shaw
Cuando el pasado 20 de octubre fui a la reinauguración, me ganó la emoción de regresar a un lugar emblemático, que había sido parte de mi labor en el área de relaciones públicas. Creo oportuno replicar una nota publicada en la revista del Hotel Victoria Plaza, hace exactamente 35 años, hoy que estamos cerca el 70° aniversario del viejo y querido HVP; desde octubre de 1999, Radisson Montevideo. Es también un homenaje a María Rosa Atella -autora de la nota- y de tantos ex compañeros que hoy aún son parte de ese establecimiento, y de otros con los que nos unen tantas vivencias!
El paraíso recobrado ( www.chacralaredencion.com.uy)
Y la historia continuó
Obviamente la historia continuó, con personajes como Theodore Davenport y su señora Adela Copperti, quienes la compraron en 1966, la restauraron y vivieron en la hermosa casona. Teddy no se contentó sólo con vivir allí, decidió promocionar el lugar y creó el “Gaucho Tour”, con paseo tempranero a la cercana Tablada y luego les ofrecía un asado criollo en La Redención. En 1976, dos empresarios la compraron y construyeron los salones cerrados para fiesta, ampliando la capacidad, tanto para recibir a turistas como a residentes. En 1978, La Redención pasó a manos de la Compañía Rioplatense de Hoteles SA, propietaria también del Hotel Victoria Plaza. Fue declarada Patrimonio Histórico Nacional
La Redención hoy

Hoy La Redención renació totalmente renovada, pero a la descripción de arriba no le cambiaría ni una coma…
La majestuosa entrada por el acceso del Camino de la Redención nos introduce en los jardines decorados con antorchas, faroles coloniales y fanales con velas, y nos guía hasta el área de estacionamiento vigilado, flanqueada por la torre fechada en 1898.

Los portones de rejas muy trabajadas se abren a los jardines del gran patio colonial y al camino de acceso, abrazado por la pérgola invadida de flores. El famoso brocal de mármol de Carrara atrae todas las miradas.
Desde allí se ingresa a un lobby, que en la noche del 20 de octubre, destacaba iluminado por cientos de velas, y luego se accede al gran salón principal, totalmente renovado. A la izquierda un gran bar, a la derecha, una exposición de originales arreglos florales. En dos eventos en los que participé en La Redención en estos días, la disposición de la gran sala era totalmente diferente; una con mesas para una cena, otra con distintos tipos de livings y áreas para pequeños grupos, algunas con mesas tipo pub y banquetas altas, otras con sillones, mesas ratonas y pufs. Su capacidad es de 120 a 700 invitados.
El Salón Colonial ubicado en el casco histórico de la antigua estancia, puede alojar entre 20 y 120 invitados; tiene acceso directo al área de parrilleros techada y al hermoso patio de ingreso.
La Redención cuenta con equipo generador de energía eléctrica. Dispone de discoteca, audio y luces robóticas en una gran pista central. La iluminación del círculo exterior es cálida con arañas y spots direccionados, controlados por dimmers. Hay una terraza con salida a los jardines con los árboles iluminados. Asimismo, el predio dispone de cancha de fútbol y vóley, así como juegos infantiles y de jardín.
En resumen, La Redención ofrece todos los servicios que se requieren para reuniones de alto nivel y volver a ser uno de los centros de eventos más importantes de Montevideo, con impronta moderna y cimientos en la mejor historia y tradición. El respaldo es del Radisson Montevideo Victoria Plaza Hotel, tal como fue señalado por el gerente general, Reynaldo de Gregorio en su discurso la noche del 20 de octubre, al reinaugurar las instalaciones y comenzar las celebraciones de los 70 años del HVP que se cumplen el 15 de diciembre.