LA CÚPULA DE THE PALACE: UN BRINDIS FLORAL DONDE ARTE Y NATURALEZA SE ENTRELAZAN

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Donde las flores suspiran arte: un jardín efímero nace en The Palace
By. Ana Belén Toribio
«La naturaleza es el arte de Dios», sentenció Dante. Y en el corazón de Madrid, bajo la majestuosa cúpula del The Palace Hotel, esta verdad se despliega con una belleza conmovedora. Allí, la centenaria Maison de champagne Perrier-Jouët, unida a la visión de la artista floral Elisabeth Blumen, ha tejido una escultura efímera que susurra el legado Art Nouveau a través de pétalos y tallos. No es solo una instalación, es un himno a la profunda conversación entre el ingenio humano y la eterna inspiración natural.
Como un sueño suspendido, este jardín interior nos invita a sumergirnos en un universo donde el arte florece y la naturaleza se eleva. Desde 1811, cuando Pierre-Nicolas Perrier, botánico y viticultor, y Rose-Adélaïde Jouët, amante del arte, fundaron esta casa, Perrier-Jouët ha sido un eco constante de lo natural y lo bello. Hoy, esa filosofía se encarna en cada burbuja de sus champagnes y en cada colaboración que abraza, como esta, que rinde tributo a sus orígenes.
La belleza: un diálogo entre pasado y presente
Elisabeth Blumen, con su pincel de flores, ha concebido un paisaje onírico, un espacio donde la delicadeza orgánica se convierte en lenguaje. Su estilo, tan refinado como poético, transforma la cúpula en un lienzo donde «el arte lava del alma el polvo de la vida cotidiana», como Picasso una vez expresó. Es un gesto efímero, sí, pero su impacto es duradero, una experiencia que eleva el espíritu.
Esta creación es un eco de la icónica botella Belle Époque, un testimonio del genio de Émile Gallé, figura cumbre del Art Nouveau. Sus anémonas japonesas, dibujadas a mano en 1902, se convirtieron en la firma visual de Perrier-Jouët, una impronta que sigue viva, conectando la Maison con su rica herencia artística. Y no solo eso, esta danza floral también conversa con la Maison Belle Époque en Épernay, hogar de la colección privada de arte Art Nouveau francés más extensa de Europa, un tesoro protegido por la UNESCO.
Un brindis bajo la cúpula: donde la vida es arte
«La vida imita al arte mucho más de lo que el arte imita a la vida», dijo Oscar Wilde. Y en The Palace, esta máxima cobra vida, especialmente con el regreso del icónico Opera & Brunch. Cada domingo, bajo esta cúpula transformada, la gastronomía, la música en directo y el arte se funden en una sinfonía. Una copa de Champagne Perrier-Jouët Grand Brut da inicio a un recorrido culinario y sensorial que promete ser inolvidable. Es la oportunidad perfecta para dejarse envolver por este escenario donde la belleza, la emoción y la naturaleza convergen.
Con esta instalación, Perrier-Jouët nos lanza una invitación, la más profunda de todas: detenernos, observar, maravillarnos. Reencantar lo cotidiano a través de la belleza efímera, la emoción sincera, y la inspiración inagotable que nos brindan la naturaleza y el arte. Porque, al final, son ellos los que nos guían hacia lo verdaderamente extraordinario.
F/ gastroystyle