EL POLLO A LA BRASA PERUANO…PATRIMONIO CULTURAL DE LA NACIÓN

Pollito con papas…pollito con papas…
El Día del Pollo a la Brasa es una fiesta que se celebra en Perú el tercer domingo del mes de julio, en reconocimiento a uno de los platos más representativos y de mayor consumo de la gastronomía peruana. El año 2010, mediante la Resolución Ministerial 0441-2010-AG,5 el Ministerio de Cultura, que el 2004 lo había declarado Patrimonio Cultural de la Nación, resolvió declarar el Día del Pollo a la Brasa con el fin de homenajear a un «ícono» de la gastronomía peruana y promover su consumo tanto en el Perú como en el extranjero.
Hablar del Pollo a la brasa es hablar del plato más consumido del Perú. Su jugoso sabor y su costo accesible son algunas de las variables que explican su éxito entre los comensales. Pero no son las únicas.
En el Perú se consume un promedio de 130 millones de pollos se consume al año. Y por si esto fuera poco, existe el Día del Pollo a la Brasa, celebrado mordisco a mordisco cada 21 de julio, y existen más de 13 mil pollerías en todo el país
¿Qué hay detrás de esta fiebre por el Pollo a la brasa que ha colonizado tanto al Perú como a diversos países del mundo? Ahondemos un poco en la historia de este plato.
Origen de la tradición
Los inicios del Pollo a la brasa tal como se consume hoy en Perú se remontan al año 1949, cuando Roger Schuller, un inmigrante suizo dedicado a la crianza de pollos, comenzó a cocinar estas aves atravesadas en una vara de hierro -es decir, ‘al espiedo’- para venderlas al público. Sin embargo, esta modalidad era muy lenta y no servía para cocinar en grandes cantidades.
Fue entonces que don Roger, junto a un amigo, diseñó un nuevo sistema de cocción más rápido y eficiente, a través de un conjunto de varillas que giraban dentro de un horno. Cada día, acudían más y más comensales en busca del sabroso pollo de granja del señor Schuller.
Con el tiempo, se agregó como guarnición una porción de papas fritas y ensalada. El plato empezó a difundirse en todo el territorio nacional y pronto se instaló para siempre en el gusto de las familias. Hoy, el Pollo a la brasa es reconocido como Patrimonio Cultural de la Nación.
«Un pollito que es cierto, existe en todo el mundo, cada uno con su sazón, sus guarniciones, sus tradiciones, pero que en ningún lugar ha calado tanto en el sentimiento popular como lo ha hecho en el Perú, donde se puede encontrar una pollería hasta en los pueblitos más pequeños y alejados de las grandes ciudades», explica el prestigioso chef peruano Gastón Acurio.
La receta de Su Majestad, el Pollo a la brasa, para que puedas disfrutarlo en casa.
Ingredientes: 1 pollo entero con piel y sin vísceras, 2 cucharadas de sal, 1 cucharadita de pimienta, 1 cucharadita de comino, 3 cucharaditas de ajo molido, 1 cucharadita de orégano, 1 cucharadita de romero, 4 cucharaditas de ají panca molido, 1 taza de cerveza negra, 2 cucharadas de vinagre blanco, 2 cucharadas de sillao o salsa de soya y un cuarto de aceite vegetal.
Preparación: lo primero que debes hacer es limpiar el pollo. Para el aderezo, en un recipiente grande coloca sal, pimienta, ajo, comino, orégano, romero, ají panca, sillao, vinagre, aceite y cerveza negra. Mezcla todo y deja reposar por una hora. A continuación, coloca el pollo en un molde para hornear y báñalo con el aderezo preparado. Asegúrate de que quede bien impregnado, tanto por dentro como por fuera. Deja macerar la carne por lo menos unas dos horas (en realidad lo más recomendable es refrigerarlo por 12 horas).
Una vez listo, mete el pollo al horno por alrededor de 40 minutos. Durante este tiempo, es recomendable sacarlo cada diez minutos y bañarlo con el jugo de la cocción, de esta manera no se secará y la piel quedará rostizada. Cuando el pollo esté dorado por ambos lados, retíralo y sírvelo en una bandeja, ya sea entero o cortado en presas. En Perú, el Pollo a la brasa es acompañado con papas amarillas fritas y una deliciosa ensalada fresca.
Qué esperas para ponerte el mandil y empezar a faenar esta ricura típica del Perú. ¡Buen provecho!
F/ Peru Travel