CAMINANTE NO HAY CAMINO, SE HACE CAMINO AL ANDAR…

El patrimonio cultural de los pueblos del mundo, forma parte de un importante atractivo para atraer a un nuevo turismo de masas que busca los ancestros históricos sobresalientes, de los lugares que visita.
2017 AÑO INTERNACIONAL DEL TURISMO SOSTENIBLE, PARA EL DESARROLLO
Y EL MUNDO SIGUE ANDANDO…
Por. Antonio-Pedro Tejera Reyes*
“Según aprobó la Asamblea General de las Naciones Unidas con la designación del año 2017 como el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo, “se reconoce la importancia del turismo internacional y, en particular, la designación de un año internacional del turismo sostenible para el desarrollo, con el fin de que promueva una mejor comprensión entre los pueblos del mundo, incitando a que se tome una mayor conciencia de la riqueza del patrimonio de las diversas civilizaciones, y llevando a una mejor apreciación de los valores inherentes de las diversas culturas, contribuyendo así al fortalecimiento de la paz en el mundo”, apoyándose en el conocimiento y la gestión, de la Organización Mundial del Turismo.” Marzo 2017/ Turista Magazine Destino.
Con este preámbulo, queremos esbozar, un comentario sobre el movimiento mundial que ha producido esta declaración de las Naciones Unidas, que está haciendo correr ríos de tinta – como se decía antiguamente – sobre el particular, y seguramente haciendo reflexionar mucho a quienes compete el interpretar y poner en escena, esos principios que el desarrollo del turismo sostenible lleva consigo, algo bastante más importante que unas simples líneas literarias, o un “brindis al sol” que sólo servirá para rellenar actos políticos confundiendo a propios y extraños, sin aportar nada a la causa.
CAMINANTE NO HAY CAMINO…
Acierta en su visionario poema el inmortal vate español Antonio Machado, cuando escribió “Caminante no hay camino, se hace camino al andar…” Parece como si hubiese presentido lo que el turismo ha hecho con el mundo, llevándonos de un lado a otro, “haciendo caminos” por excepcionales lugares para que nuestros universales turistas disfruten de maravillosas e innumerables creaciones de La Naturaleza, y la diversidad de culturas mundiales, en los cuales este “Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo” tiene fundado su mensaje, algo que tenemos el deber de promocionar y aclarar los que hemos podido disfrutar en toda su extensión de esos valores naturales que conforman la vida de los pueblos, sus ancestrales costumbres, mitos, leyendas y realidades.
Un mundo que está ahí. A la vuelta de la esquina. Que tenemos el deber de conservarlo “para el desarrollo del turismo sostenible”… que se remonta en los siglos con descripciones en la literatura universal desde la “Ínsula Barataria” de Sancho Panza, hasta los viajes programados de Thomás Cook… “se hace camino al andar”…

“Caminante no hay camino, se hace camino al andar…” F:La Familia de Broward
Hay que parar el destrozo que hemos causado en muchísimos emblemáticos lugares: campos, ciudades, edificios, etc., y en lo más profundo de nuestras ancestrales costumbres.
El turista moderno ha descubierto que la cultura de los pueblos es un patrimonio que merece ser respetado. Nos llamaba la atención, allá por los años sesenta del pasado siglo, ver los grandes grupos de turistas chinos escuchando a su guía especializado entre las ruinas de Atenas, al pie de la Torre Eiffel, o sencillamente por las calles de Madrid, por no irnos a la lejana Turquía y su Mezquita Azul, o al Coliseo Romano. Todo un espectáculo que nos daba, en esos pasados años, la posibilidad de estudiar a donde se podría llegar con esa corriente turística que comenzaba a recorrer el mundo, apreciando las reliquias históricas de los pueblos y las múltiples variables que la naturaleza nos regala con sus incontables bellezas… Hoy China es el primer país exportador de turistas, del mundo.

Las ruinas de Atenas, uno de los lugares más visitados del mundo, son ejemplo vivo de la importancia del desarrollo sostenible, conservando los valores históricos como referentes de la vida cultural de las antiguas generaciones.
VALORES TURÍSTICOS APRECIABLES
Estamos ante una dimensión inconmensurable del movimiento trepidante del turismo mundial que salta todas las barreras y predicciones, superando las más profundas crisis mundiales llámense bélicas o económicas con una fuerza y una potencia, que hace suponer que su incremento es algo imparable.
No se cesa la actividad de los empresarios mundiales del sector turístico, en descubrir nuevas rutas, nuevos mercados, nuevos atractivos y nuevas formas para viajar. Es el mundo moderno en el que estamos sumergidos, donde se siguen cometiendo increíbles atropellos y disparates, debido a la rápida evolución del sector que ha propiciado la falta del conocimiento necesario para gestionarlo debidamente y con toda justicia.
Es el tributo que se está pagando y que algunos soportamos en carne propia sin poder hacer nada para defendernos.
No son de garantía la toma de decisiones que destruyan o alteran el paisaje, al igual que los valores culturales de los pueblos. Se hace imprescindible una toma de conciencia de la necesidad de conservar las “señas de identidad” de los mismos, como repetidamente sostenemos a través de toda una larga campaña literaria desde hace muchos años.
Son los valores culturales los que identifican y que sirven de atractivo, para desarrollar ese turismo sostenible que las Naciones Unidas, a través de la Organización Mundial del Turismo, ahora está exaltando con su “Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo”.
Son los valores que tenemos que “disfrutar sin poner en peligro el disfrute de los mismos de las generaciones futuras”, como está recogido en la Carta Europea del Turismo Sostenible, apoyando el Informe Bruntdland, para la Comisión Mundial sobre Medio Ambiente y Desarrollo. Año 1989.
…Y EL MUNDO SIGUE ANDANDO

Las Huellas de Acahualinca, fueron descubiertas en el año de 1874, según investigaciones deben tener de entre 6 y diez mil años
Efectivamente. El mundo sigue andando, y seguimos haciendo “camino al andar”, pero las huellas de esas pisadas, son el atractivo número uno del turismo que viene. No hay que dudarlo, solo hay que analizar concienzudamente la realidad actual y hacer las valoraciones necesarias de los hechos que han marcado esas huellas. No hay que irse a las inexplicables huellas de Acahualinca, en esa Nicaragua de mis amores, hay que centrarse en las que hace muy pocos años ha dejado el desarrollo del turismo en las costas mediterráneas, o en las Islas Canarias.

Panorámica de la ciudad de Palma de Mallorca, capital de la isla española mediterrána, que es el sueño de todos los turistas de norte europeo durante la temporada de verano
Todo un espectro que nos dará elementos para efectuar una valoración oportuna de lo que debemos hacer con lo que tenemos si queremos subsistir en ese mundo del turismo que viene, donde, por supuesto, tiene una muy especial cabida el ambiente mítico de la Cartuja de Valdemosa, al igual que el de la Plaza Gomila – siguiendo con Mallorca – o nuestras idílicas veladas en Tagomago, para no salir de esa maravillosa isla mediterránea.
*Del Grupo de Expertos de la Organización Mundial del Turismo.
*Foto de portada: El autor de este articulo nos envía este recuerdo de uno de sus innumerables viajes esta vez desde Turquía y su Mezquita Azul.