“EN LA PUERTA DEL HORNO SE QUEMA EL PAN”

Dice el dicho popular, y eso prácticamente dejó “bouche bée” como dirían los franceses, a tirios y troyanos que están en la contienda política hacia la presidencia del Perú 2016, con la movida política del gobierno peruano, aumentar el sueldo mínimo  (RMV), “caballito de batalla” para ganar el voto de las masas, de todos los candidatos , a cual más generoso, en su promesas de aumento.

Algunos candidatos ofrecía aumentar  el sueldo mínimo de S/ 750.00  (más o menos 220 dólares) hasta $ 300… Pues el gobierno en una jugada maestra aumentó el sueldo mínimo en S/ 100. ($ 22.00  más o menos), que realmente no soluciona nada, y sigue siendo un sueldito indecente. Sin embargo le quitó fuerza a las promesas electorales.

Ciertamente los economistas están a favor o en contra de acuerdo a sus simpatías políticas ya  que todos tienen su corazoncito de algún color político…

No obstante copiaremos textual lo que dijo Martín Pérez Monteverde, presidente de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales (Confiep)  no hace  mucho «todos los candidatos se van a apoyar» durante sus campañas electorales, sobre la RMV. Pero  lo importante es que expliquen con base en qué se tomará esta medida ya que se debe considerar la inflación, la productividad, y factores técnicos que maneja el Consejo Nacional del Trabajo”.

Reamente era como una tómbola o una subasta quien ofrece más… “Creo que hacen mal los candidatos en dar la sensación de quién da más, porque pierden credibilidad y el sistema pierde credibilidad. Decir S/. 850, S/. 900, S/. 1000. La gente le pierde confianza a los candidatos” aseguró  en diciembre el alto funcionario…

Suponemos que todas esas premisas el gobierno las debe haber tomado en cuenta. Los trabajadores consideran que el aumento como es natural no les soluciona nada y hay candidatos que después de la sorpresa siguen insistiendo en si se puede aumentar un poco más…

¿Cómo y de Dónde? «That’s the Question… Sino todo queda en «Palabras… palabras… palabras», como la canción.

Elena Villar

Directora